Un crédito de consumo es el producto financiero más básico que podemos solicitar en una institución financiera, ya que es un monto de dinero que sirve para cualquier cosa que queramos hacer con él. Así de simple. Lo importante de esto es que elijas bien, por lo que calcular el costo de este se hace indispensable. ¿Quieres saber cómo hacerlo? Te lo contamos a continuación.

Cuando vamos a solicitar un crédito de consumo, independiente si es porque quieres comprarte el último televisor, pagar el arreglo de tu casa o salir de un hoyo financiero, debemos llevar a cabo una responsable mirada a lo que nos ofrece el mercado. En ese sentido, las comparaciones con unos y otros créditos de diferentes instituciones nos puede llevar a encontrar lo que queremos y lo que se ajuste definitivamente a nuestros bolsillos. Para ello debemos usar distintas herramientas que se encuentran a la mano, como nuestro comparador online o los simuladores que cada una de las instituciones bancarias tiene en sus sitios. Más allá de todos los detalles en los que nos debemos fijar, existe uno que es el más importante de todos, el costo final del crédito de consumo.
Calcular el costo de un crédito de consumo
A veces, cuando nos decidimos a solicitar algún producto financiero y somos responsables, revisaremos punto por punto lo que nos conviene o no sumando y restando beneficios o aportes importantes que otros no nos entregan. Hasta ahí todo bien, sin embargo, hay un punto básico que debemos mirar y revisar antes que todo, este es el costo final del crédito y las cuotas que pagaremos mensualmente, ya que, si no lo hacemos así, nos dedicaremos a investigar otros puntos que no son tan relevantes en un principio. Por ese motivo, lo primero es lo primero.
Uno de los primeros items que debemos tomar en cuenta es cuánto dinero queremos pedir y cuánto seremos capaces de pagar mes a mes. Suena lógico, pero muchas veces no lo hacemos. Para realizar este sencillo cálculo debemos revisar cuánto estamos gastando mensualmente. Una vez que está todo listo y conocemos la cantidad de dinero que tendremos disponible para pagar una vez nos llegue nuestro sueldo, podemos proceder al próximo paso, el más importante.
Si ya utilizamos el comparador online y ya elegimos la entidad con la que trabajaremos, podemos ingresar a la página de la institución y usar el simulador de créditos de consumo, el cual debería darte el monto final del crédito, o sea lo que terminarás pagando en realidad y el valor de la cuota mensual. Con eso ya puedes hacerte una idea más completa del crédito de consumo.
Las variables que afectan el costo de un crédito de consumo
Aunque en estricto rigor las variables que veremos a continuación por sí solas no determinan el costo total final de tu crédito de consumo, sí son parámetros importantes a tener en cuenta para tu evaluación financiera.
Estas variables son:
- El CAE o Costo Anual Equivalente: Con la Ley 20.448 y el Reglamento N° 1.512 se reguló la implementación de los crédito universales, lo que también ayudó a transparentar la información relacionada con los productos. Es ahí donde entra la función del CAE, elemento que nos muestra con valores porcentuales el costo total anual del crédito de consumo contemplando todo, incluso los seguros. Si tenemos dos créditos iguales, o sea, que estamos solicitando el mismo monto, pero tenemos diferentes CAE, debemos escoger el menor, ya que eso nos generará un ahorro.
- La Tasa de Interés: Aunque la tasa de interés esté contemplada dentro del CAE, es una variable que por sí misma te da una idea ya de cuánto más o menos te costará tu crédito de consumo. Mientras más alta la tasa, mas alto el costo del crédito. Hoy podemos decir que las tasas más bajas en créditos de consumo bordean el 0,7% anual y esta tasa la consigues con BCI, banco que se ha caracterizado por tener históricamente los consumos más bajos de la industria. Otros bancos pueden llegar a cobrar incluso mucho más allá de lo legalmente permitido.
- El Plazo: No menos importante que las otras dos variables anteriores, es el plazo en el cual tomes tu consumo. Una máxima para hacer tus adquisiciones es determinar siempre un plazo que se condiga con la durabilidad de tu bien de consumo. Es decir, si vas a comprar diésel para tu auto no lo compres en 3 o más cuotas ya que es un consumo instantáneo prácticamente, es algo que no te va a durar, mientras que si compras un refrigerador o máquinas para tu negocio, sigue siendo prudente comprarlos hasta el un plazo de 5 años, que es la vida útil que tendrán esos artefactos en buenas condiciones. Para las compras de cartera basta con que compares el consumo de tasa y/o CAE mas bajo, sin alargar más el plazo de la deuda.
- Los seguros: Cuando contratas un crédito de consumo, es necesario contratar un seguro de desgravamen y cesantía para tu tranquilidad. Tienen un costo que se suma al costo del crédito y tomarlo con el mismo banco donde tomaste tu crédito es siempre la mejor opción, aunque también puedes darte el trabajo de cotizarlos directamente en las aseguradoras y ver si te dan un mejor plan, lo cual es difícil ya que los bancos tienen convenios por volumen de ventas.

Consejos adicionales
El Sernac financiero constantemente está monitoreando los movimientos de los productos entregados por instituciones financieras, por lo que genera regularmente comparaciones interesantes, además de tener su propio simulador de créditos de consumo, el cual es bastante completo.
La entidad recomienda, además de revisar los aspectos antes comentados, recordar que cuando solicitamos uno de estos créditos el banco o la entidad emisora agregará costos de seguros que, por ley, no estás obligado a aceptar, sin embargo, en el caso que sí los quieras, deberás saber que los montos finales aumentarán.
Adicionalmente, hay otros puntos generales que te debes fijar, sin embargo, lo anterior es lo que te ayudará a calcular el costo del crédito de consumo:
- Revisa todas las tasas de todas las ofertas que tengas. La de menor pago mensual y plazo más corto siempre será la mejor.
- ¿Cuánto tiempo quieres para pagarlo? Considera este punto, ya que, entre más largo el periodo, más pagarás al final.
- ¿Qué beneficios te da la institución? pregunta por pagos diferidos y fechas de gracia. Así te puedes organizar mejor con los pagos.
- Cotiza en todos los lugares que puedas, no sólo en bancos. Incluye en tu búsqueda a las cajas de compensación y a las cooperativas de ahorro y crédito.
- Cualquier duda que tengas al respecto de la institución la puedes despejar en la Superintendencia de Bancos e Instituciones financieras, ya que ahí es el punto donde convergen todas las dudas y respuestas relacionadas con ese mercado.
- Consulta los costos de un prepago y las condiciones de cobro en esos casos. Eventualmente podrías prepagar tu crédito y si el banco te da buenas condiciones terminas siempre pagando menos por tu crédito total.
Recuerda, no debes dejar de cotizar, revisar, informarte y comparar las ofertas que tiene el mercado, ya que es la única forma de que puedas obtener lo mejor para lo que estás buscando. En ese sentido, según informes del Sernac Financiero existen en estos tipos de productos variantes de hasta 400%, lo que demuestra claramente el sentido de revisar distintas instancias bancarias. Una razón más para que te motives a obtener todos los datos que sean necesarios.